domingo, 23 de diciembre de 2018

NOCTURNO


La noche. Voz, ninguna.
Bill Evans
tocando para mí.
Lloviznas
finísimas. Aceras
frías, solas. Y gentes, coches, gentes,
reflejos huidizos
pasando,
pasando.

Esquiva
noche,  pasando. Algo
oscuro,
tan oscuro, tan solo
aunque mío, pasando,
en mí, por mí, conmigo.

Pero ningún sentido.

Tú no volverás nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario